Cuando los ruidos de la realidad se esconden detrás de un sillón,
la vida que habita en mi interior comienza
a aparecer. Me he preguntado ¿qué es la
esperanza? Podría aludir a un día de sol que te despierta casi con el augurio de
un amanecer. Quizás tenga un sustento lógico o basado en la fe, ¿importa el origen?
Suele aparecer ese “algún día”, “el ojalá”, el “que así sea”, el “confiar en lo que se desea”,
tantas otras expresiones. Es mucho más que un estado de ánimo. Mientras la
llovizna va tomando poderío sobre la tarde, me gusta observarla por mi ventana.
Y mis pensamientos me llevan a lo vivido hasta hace tan poco tiempo, días,
semanas, meses u horas quizás. A veces
es mi bandera frente a las cuestiones que suelen aquejarme, que generan tanta incertidumbre o a veces es la
propia resistencia de mi naturaleza herida, a veces…La esperanza se deja ver en
otros, en los logros, en los aciertos y en esa fuerza que los sujetan tanto a
la vida, en esos momentos la felicidad es compartida. La tierra se ve
húmeda y el pasto pareciera que se vuelve de ese verde intenso color esperanza.
Hace un tiempo que mi corazón ha dejado
de ser rojo, se ha teñido de verde y su latido es más fuerte. El mientras tanto
se ha vuelto activo, gobierna mis opciones en mis días. A ésta edad los afectos
sinceros se quedan y los que no, se
alejan con la libertad que se le ha otorgado, es parte de un camino que he
decido forjar, creo en lo verdadero que sólo se construye con el tiempo. En ese
espacio no hay lugar para cadenas, ni ansiedades, “solo se crece”. El rosal ha
florecido un hermoso pimpollo rojo se ha abierto de par en par, sus pétalos se
dejan admirar y las espinas ya no están.
La esperanza no tiene tiempo, no
sabe de finales, es un camino concreto que si bien a veces nos pide cambiar las
zapatillas rotas, pero con el afán de continuar. Sigue siendo un escudo, una
emoción que nos permite madurar…La noche ha llegado y lo que tengo no es para
mí, ni para guardarlo en un álbum de recuerdos, es para aquel, aquellos que desean
ser parte de mi vida…
AVG
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